Yo
me imagino ser
Una
palmera de sueltas greñas,
Con
el viento salado de la noche
Besando
la apacible desnudez
De las arenas
Me
imagino más cerca
De lo alto,
De
lo dulcemente azul
Que nos rodea
Y contemplarlo…
Soy
palmera hundiéndome en las nubes,
En
la soledad de plumas nacaradas,
En
el callado viento que murmura
Historias
de sangre, sal y barcos.
Soy
la única palmera que subsiste,
La
única sobreviviente a la sequía
Sola,
erguida en esta isla
Que
la arena y que los astros.
Espiga
sin voz que va arrullando
El
dormirse tranquilo de las horas,
Verde
que sostienen las gaviotas,
Verde
que se estira hasta más verde
Y
que a veces
También llora